El enviado especial del presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, Steve Witkoff, ha realizado una visita no anunciada a Rusia, marcando su tercer viaje desde que Trump regresó al cargo. Se espera que Witkoff se reúna con el presidente ruso Vladimir Putin y su enviado de inversiones, Kirill Dmitriev, en un esfuerzo por impulsar un alto el fuego en la guerra en curso en Ucrania. La visita se produce en medio de estancadas negociaciones de paz y creciente frustración por parte de Trump ante los retrasos de Moscú. Aunque no se esperan avances significativos, se informa que Estados Unidos está advirtiendo sobre posibles sanciones si no se logra progreso. El viaje también coincide con la especulación sobre la reciente ausencia de Putin de la vista pública.
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